LA DEUDA EXTERIOR CRECIO UN 58,8 POR CIEN EN 1992, SEGUN EL BANCO DE ESPAÑA

MADRID
SERVIMEDIA

La deuda exterior de España se situó en 8,89 billoes de pesetas a finales de noviembre de 1992, lo que supuso un aumento del 58,8 por ciento en los once primeros meses del año, según datos del Banco de España.

En dólares, la moneda en que está contraida un mayor porcentaje de la deuda exterior, ésta se redujo sensiblemente en los últimos meses del año pasado, pero no lo suficiente para compensar los negativos efectos de la devaluación de la peseta.

Concretamente, la deuda exterior ascendía a 83.592 millones de dólares en el mes de setiembre y diminuyó hasta 77.143 millones en noviembre. Sin embargo, en ese mismo periodo pasó de 8,26 a 8,89 billones de pesetas.

A lo largo del año, la evolución más negativa fue la de las empresas, cuya deuda aumentó un 25 por ciento y se situó en 43.832 millones de dólares, unos 5 billones de pesetas al cambio de noviembre.

De ese endeudamiento, 30.879 millones de dólares corresponde a las empresas privadas, especialmente a las eléctricas, que acumulaban una deuda de más de 800.000 millones de pesetas. Otos 12.953 millones de dólares son deuda de compañías públicas.

MAS DEUDA PUBLICA

Las administraciones también incrementaron su endeudamiento exterior, al pasar 9.372 a 13.816 millones de dólares, con un incremento del 47,4 por ciento.

Las corporaciones locales prácticamente duplicaron su deuda, que se elevó de 214 a 423 millones de dólares. El Estado la incrementó de 8.140 a 11.533 millones, en tanto que en las autonomías pasó de 1018 a 1.860 millones.

Entre los acreedores, continúa incremntando su protagonismo el Banco Europeo de Inversiones, dependiente de la Comunidad Europea, al que las empresas españolas deben 11.062 millones de dólares.

Con la banca privada foránea, el endeudamiento se eleva a 15.578 millones de dólares, lo que supone un sustancial crecimiento respecto a los 14.171 millones finales del 91.

La deuda impagada al vencimiento es de 2.865 millones de dólares, alrededor de 330.000 millones de pesetas, lo que supone casi el triple que al principio del ejercicio.

Este fenómeno está ligado a la liberalización de los movimientos de capitales, que ha permitido solicitar créditos en el extranjero sin restricciones desde el pasado mes de febrero.

(SERVIMEDIA)
16 Mar 1993
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