El médico fue detenido por funcionarios de la comisaría de Centro tras haber realizado unaoperación policial en el distrito y haber intervenido recetas expedidaas por José P.B.

Por otra parte, vecinos de la calle Martínez de la Riva, donde el médico pasaba consulta, habían remitido escritos de protesta a la comisaria de Vallecas, por la contínua presencia en la finca de drogodependientes, que causaban desperfectos y molestaban a los inquilinos.

El pasado día 9, la policá estableció una vigilancia en torno al edificio en que estaba ubicada la consulta. De ese modo, los funcionarios puderon comprobar cómo algunos conocidos vendedores de fármacos, que operan en el centro de la capital, se hallaban por los alrededores.

Funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía identificaron a una pareja, que acababa de adquirir en una farmacia cercana tres cajas de Centramina y una de Reiphnol.

Según consta en diligencias policiales, el facultativo cobraba 2.000 pesetas por cada consulta y extendía tres recetas: dos de de Centramina y una de Reiphnol.

Por otra parte, la titular de la farmaia, situada en el Pueblo de Vallecas, donde la casi totalidad de los drogodependientes acudía a comprar medicamentos, señaló que desde enero del pasado año ha expendido unas 25.000 recetas firmadas por el doctor José P.B.