DETIENEN A UN FURTIVO QUE ACABABA DE MATAR UNA AVUTARDA CON UN RIFLE D MIRA TELESCOPICA Y SILENCIADOR

AVILA
SERVIMEDIA

Luciano M.R., vecino de Madrid, fue detenido por la Guardia Civil en Horcajo de las Torres (Avila), cuando transportaba en un todoterreno un macho de avutarda que acababa de abatir. También le incuataron el rifle con silenciador y mira telescópica con el que habría perpetrado el delito.

Después de deternele, los guardias transportaron al delincuente ante el juez de instrucción de Arévalo (Avila), quien ordenó su puesta en libertad proviional, tras hacerle prestar declaración.

El rifle, el silenciador, la munición y demás accesorios empleados por el furtivo para delinquir quearon depositados en la oficina de intervención de armas del cuartel de la Guardia Civil de la localidad vecina de Madrigal de las ALtas Torres.

Según explicaron a Servimedia fuentes de la Guardia Civil que intervinieron en la operación de captura del furtivo, la detención se produjo porque, además de que estamos en plena época de veda de las especies cinegétcas, la avutarda está protegida desde hace más de diez años, por tratarse de un ave esteparia en peligro de exitinción.

Esa condición hace de las avutardas presa codiciada por los furtivos y coleccionaistas de trofeos, que pueden llegar a pagar hasta medio millón de pesetas por un macho de las características del que incautaron los guardias en el coche de Luciano MR.

Además, el empleo de silenciador constituye un agravante más, puesto que su empleo esta rigurosamente prohibido por la legislación igente en materia de caza y conservación de la naturaleza.

Las fuerzas de la Guardia Civil que detuvieron al furtivo enviaron la avutarda muerta al museo de Ciencias Natuiralez de Madrid para su converación.

En los meses de primavera, epoca del apareamiento y nidificación de las avutardas, resulta particularmanete sencillo aproximarse a estas aves y seleccionar, desde poca distancia, los trofeos más atractivos.

El empleo de automóviles facilita la aproximación, puesto que, como otros muchos nimales salvajes, las avutardas no recelan de los vehículos de motor y se dejen acercar a muy poca distancia.

(SERVIMEDIA)
29 Mayo 1991