Los detenidos son Francisco M.G., de 32 años; su mujer, Ana C.H, de 30, y la hermana de ésta, Sebastán C.H., de 21, que anteriormente había sido arrestado en 22 ocasiones y era la persona encargada de vigilar la vivienda.

Fuentes policiales indicaron que los traficantes arrestados, que recibían la mercancía de otras provincias, la vendían a "camellos" de menor entidad, que a su vez la hacían llegar al consumidor.

De esta forma, indicaron las mismas fuentes, los detenidos no mantenían relaciones directas con los drogadictos, sino con los pequeños traficantes de distintas zonas de la ciudad, en epecial los que venden el estupefaciente en el barrio de Pescadería.

En un registro realizado en un domicilio, la policía intervino 1.500 dosis de heroína, después de que unos 30 gramos de esta droga fueran arrojados al retrete por los detenidos al percatarse de la presencia policial.

Los agentes encontraron también en el piso utensilios utilizados para el pesaje, corte y consumo de droga; numerosas joyas, valoradas en más de 2 millones de pesetas, una cartilla de ahorros con más de 600.000 peseta y más de 2 millones de pesetas en efectivo.