Se trata de Juan Benítez Meño, de 20 años; Francisco Medina Rebolledo, de 19, y José María Pérez Martín, de 40. Los dos primeros están acusados de robo con intimidación y el tercero de robo con fuerza.

Sobre la una de la tarde de ayer, dos jóvenes que se encontraban en la estación de ferrocarril de Recoletos fueron abordados por un par de desconocidos, quienes, tras amenazarles con un ama blanca que dijeron llevar en el bolsillo, les exigieron la entrega de sus cazadoras de cuero.

Ante la negativa de las dos víctimas a desprenderse de las prendas, los agresores reaccionaron violentamente y golpearon a los dos jóvenes, quienes finalmente tuvieron que entregar sus cazadoras, valoradas en 70.000 pesetas.

Un comunicante anónimo que presenció los hechos llamó al 091 y los integrantes de un coche patrulla se personaron en el lugar, donde detuvieron a los dos ladrones. Una de las víctmas tuvo que ser asistida en el equipo quirúrgico de Montesa, al sufrir contusión nasal, epístasis y erosiones múltiples.

Tanto Juan Benítez Meño como Fernando Medina Rebollo habían sido detenidos anteriormente en doce ocasiones por delitos contra la propiedad.

Tres horas más tarde, funcionarios de otro radiopatrulla detuvieron a José María Pérez Martín, de 40 años, acusado de robo con fuerza en el interior de un turismo, aparcado en la confluencia de las calles Claudio Coello y Goya.

Según a Jefatura Superior de Policía de Madrid, el propietario del automóvil regresaba a su coche cuando encontró en su interior a un individuo, que había forzado la puerta delantera derecha y estaba desarmando el casete.

El delincuente se abalanzó entonces contra el dueño del vehículo, a quien golpeó repetidamente, aunque aquél repelió la agresión de manera expeditiva.

Los policías de un radiopatrulla del Cuerpo Nacional de Policía que circulaba por la zona consiguieron inmovilizar al agresor, que, aligual que el propietario del coche, tuvo que ser atendido de lesiones leves en el equipo quirúrgico de Montesa.

José María Pérez Martín tiene 30 antecedentes delictivos, según la Jefatura Superior de Policía.