Tanto en el domicilio de ambos como en una caravana, los agentes requisaron una gran cantidad de boletos de la ONCE, una lista en blanco de premios de la misma organización, varios paquetes de papeles recortados del tamaño de billetes y otros útiles para cometer ese tipo de estafas.

Según informó hoy la Jefatua Superior de Policía, el timo más importante del que están acusados los detenidos es el cometido el pasado mes de octubre, cuando a un anciano de 72 años le estafaron dos millones de pesetas.

La víctima acababa de retirar esa cantidad de una agencia bancaria cuando un desconocido se acercó a él y le preguntó a dónde se dirigía. Al responder que a Villaverde, su interlocutor se ofreció a llevarle en el coche, en el que había otro individuo.

Por el camino, uno de ellos le mostró ocho cupones de laONCE que, según dijo, podían estar premiados. Pararon frente a un quiosco y, efectivamente, les habían correspondido 20 millones de pesetas.

Eufóricos por la noticia, los timadores donaron dos de los cupones al anciano y entraron a un bar a celebrarlo. Allí convencieron al anciano para que dejara en la guantera los dos millones de pesetas, ya que desde la cristalera del bar podían controlar el vehículo.

Aprovechando que la víctima estaba pagando las consumiciones, los delincuentes abandonaron preipitadamente el bar y huyeron en coche. Posteriormente se comprobó que los cupones en poder del anciano no tenían premio.

Según las investigaciones, los detenidos son presuntos autores de otros timos en el distrito de Usera y Villaverde por importe de un millón de pesetas.

Con ellos colaboraron otros estafadores, que hacían el papel de tonto y que están siendo buscados. Juan López Frías había estado detenido anteriormente en dos ocasiones por estafa y su hermano en una.