Según informó este lunes la Guardia Civil, la investigación comenzó a principios de año tras un robo con violencia cometido en una prestigiosa empresa ubicada en el sur de la isla de Tenerife. Los atracadores llegaron a amordazar y golpear a las víctimas para conseguir el botín.

Para realizar los atracos, los detenidos contaban con una gran preparación previa, ya que habían estudiado al detalle el asalto, el cual ejecutan con sorprendente rapidez. También incorporaban con inmediatez el dinero sustraído en el circuito legal, para lo cual contaban con una estructura estable de colaboradores con los que adquirían todo tipo de bienes.

En un atraco llevado a cabo en el núcleo de Abades, situado en la localidad tinerfeña de Arico, los autores, tras identificarse como guardias civiles, dieron el alto a un trabajador de la empresa encargado del transporte de dinero en efectivo. La víctima fue maniatada y los ladrones huyeron con el dinero.

Antes de ser detenidos, los asaltantes intentaron huir y llegaron a atrincherarse en una vivienda ajena. El dispositivo policial finalizó con la detención de los cuatro autores y la recuperación de 243.000 € en efectivo, correspondiendo a la totalidad de lo sustraído según la entidad afectada.

Esta operación concluyó con la investigación de los ocho miembros de la organización, -todos ellos residentes en la isla de Tenerife-, la recuperación de la totalidad del dinero sustraído y la intervención de siete vehículos, así como chalecos identificativos, mascarillas y gorras con anagramas de la Guardia Civil.

Según informó este lunes la Guardia Civil, la investigación comenzó a principios de año tras un robo con violencia cometido en una prestigiosa empresa ubicada en el sur de la isla de Tenerife. Los atracadores llegaron a amordazar y golpear a las víctimas para conseguir el botín.

Para realizar los atracos, los detenidos contaban con una gran preparación previa, ya que habían estudiado al detalle el asalto, el cual ejecutan con sorprendente rapidez. También incorporaban con inmediatez el dinero sustraído en el circuito legal, para lo cual contaban con una estructura estable de colaboradores con los que adquirían todo tipo de bienes.

En un atraco llevado a cabo en el núcleo de Abades, situado en la localidad tinerfeña de Arico, los autores, tras identificarse como guardias civiles, dieron el alto a un trabajador de la empresa, encargado del transporte de dinero en efectivo. La víctima fue maniatada y los ladrones huyeron con el dinero.

Antes de ser detenidos, los asaltantes intentaron huir y llegaron a atrincherarse en una vivienda ajena. El dispositivo policial finalizó con la detención de los cuatro autores y la recuperación de 243.000 € en efectivo, correspondiendo a la totalidad de lo sustraído según la entidad afectada.

Esta operación concluyó con la investigación de los ocho miembros de la organización, -todos ellos residentes en la isla de Tenerife-, la recuperación de la totalidad del dinero sustraído y la intervención de siete vehículos, así como chalecos identificativos, mascarillas y gorras con anagramas de la Guardia Civil.