Según informó este lunes la Policía, fue precisamente este vídeo el que dio inicio a la investigación el pasado 10 de marzo.

Las pesquisas de los agentes, junto con informaciones aportadas por la víctima y algunos testigos, permitieron la identificación de los presuntos autores de la vejación. Esto dio lugar a la detención de cuatro de ellos por difundir el vídeo y a declarar como investigados a otros tres por un delito contra la integridad moral y revelación de secretos.

Durante la investigación, una de las testigos recibió amenazas de casi un centenar de perfiles de Instagram y fue objeto de un agresión por parte de otras tres menores, hecho que fue grabado en vídeo y difundido también en esa red social.

Las gestiones permitieron identificar a las tres autoras de este nuevo hecho, lo que dio lugar a la detención de una de ellas por haber realizado la grabación y difusión del vídeo. Las otras dos fueron declaradas como investigadas por la agresión física.