Según informó hoy el Ministerio del Interior, los detenidos aprovechaban su actividad profesional como propietarios de un desguace y de un taller para dar salida a los vehículos robados y ocultar armas de la red.

En la operación han sido intervenidos seis coches robados, cinco motores de vehículos sustraídos, placas de matrícula falsas, cuatro armas de fuego, munición y abundante documentación.

En el marco de esta misma operación, la Guardia Civil detuvo el pasado mes de junio a otros seis presuntos integrantes de la red, que empleaban gran violencia sobre las víctimas cuando desvalijaban casas o robaban vehículos, además de estar acusados de tráfico de drogas.