Según informó este miércoles el Instituto Armado, en la ‘Operación Kazuya’ han sido intervenidos más de 4.600 kilogramos de hachís y se han incautado 11 embarcaciones y 10 vehículos.

La operación se inició el pasado mes de junio, al conocerse que una embarcación recreativa que podría estar sirviendo para introducir hachís desde las costas de Marruecos.

A partir de ese momento, se procedió al seguimiento de la embarcación, que, tras introducirse mar adentro, regresó a la costa hacia Isla Cristina (Huelva). Los agentes observaron cómo la banda sacó la embarcación del puerto deportivo de Isla Cristina y la subió a un remolque para su trasporte por carretera.

En ese momento el vehículo fue interceptado y se localizó, bajo cubierta, un doble fondo con 720 kilogramos de hachís. La actuación finalizó con la detención del conductor, la incautación de la droga y la intervención tanto de la embarcación como del vehículo.

ESCONDITE SOFISTICADO

Los investigadores continuaron con la operación ante la posibilidad de que se pudieran estar utilizando más embarcaciones recreativas para aprovechar así la temporada estival y pasar desapercibidas sus actividades ilícitas.

La Guardia Civil y la Agencia Tributaria desplegaron un dispositivo conjunto, por tierra y mar, que permitió intervenir dos embarcaciones en el río Carreras y otros 1.959 kilos de hachís ocultos en sofisticados dobles fondos.

A raíz de la última aprehensión, el grupo criminal se desplazó al río Piedras, entre las localidades onubenses de Cartaya y Lepe. En este caso, los operativos intervinieron tres embarcaciones, 1.980 kilos de hachís y detuvieron a dos de los tripulantes.

Los agentes identificaron a todos los miembros de la organización y realizaron varios registros, en las localidades de Ayamonte, Isla Cristina, Lepe y Villablanca, autorizados por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Ayamonte (Huelva).

Los registros finalizaron con la detención de siete personas más por los presuntos delitos de blanqueo de capitales, pertenencia a organización criminal y contra la salud. Asimismo, se intervinieron nueve vehículos de alta gama, dos furgonetas de gran capacidad, seis motocicletas de cross, un ‘buggy’, cinco embarcaciones, una moto de agua, más de 6.000 euros en efectivo, un dron, tres bicicletas eléctricas y diverso material informático.