Los propietarios del establecimiento, que denunciaron el atraco a las 16,15 horas -inmediatamente después de ocurrir el hecho-, indicaron a la policía que los autores eran dos individuos, uno de los cuales estaba en posesión de una escopeta de caza.

Efectivos del Cuepo Nacional de Policía y de la Policía Local de Alcorcón establecieron un servicio especial de vigilancia. Minutos después el individuo que, según la descripción de las víctimas, portaba un arma fue localizado a pocos metros del lugar donde se había perpetrado el robo.

El joven, al descubrir la presencia de la policía, intentó huir y al verse acorralado comenzó a disparar contra los agentes, que respondieron con disparos al aire, con el fin de intimidar al delincuente.

Tras el tiroteo, el presunt atracador logró esconderse en una obra cercana, donde, antes de ser detenido, mantuvo un forcejeo con uno de los agentes, al que propinó una patada en la pierna izquierda, provocándole la rotura de los músculos gemelos.

El detenido fue trasladado a la comisaría, donde se le requisaron joyas robadas, relojes y 29.000 pesetas en metálico, además de una escopeta del calibre 12 y nueve cartuchos de caza.