La investigación comenzó el pasado mes de junio, tras la denuncia de uno de los perjudicados que aseguraba haber sido víctima de una estafa. Al parecer, habían usurpado su identidad, logrando así obtener financiación para la adquisición de tres vehículos, generándole una deuda de 50.000 euros.

Tras las pesquisas llevadas a cabo, se logró localizar a tres víctimas más, que denunciaban hechos similares. Tras haber extraviado el DNI, habían usurpado su identidad y obteniendo créditos para la adquisición de diferentes vehículos. El montante total de la estafa ascendía a casi 200.000 euros.

A raíz de una laboriosa investigación, se consiguió la identificación de la persona encargada de la obtención de los créditos usando las identidades usurpadas y de la recogida de los vehículos adquiridos fraudulentamente.

Tras establecer un dispositivo de vigilancia, se logró la localización y detención de este individuo cuando se disponía a recoger el último vehículo adquirido de forma fraudulenta. Una vez puesto a disposición de la autoridad judicial, esta le impuso medidas cautelares de localización.