A las tres de la tarde del pasado sábado, una patrulla del Cuerpo Nacional de Policía adscrita a la comisaría de la Estrella encontró al detenido tendido en la acera de la mecionada calle, ya que sufría una fuerte intoxicación etílica, por lo que tuvieron que trasladarle al Hospital Gregorio Marañón.

Los agentes observaron que el cierre metálico del local estaba a medio bajar y comprobaron el desorden que predominaba en el interior del inmueble, donde había predas femeninas rotas por el suelo y un carné de identidad que pertenecía a una mujer de 27 años.

Los policías entraron en contacto con la propietaria del documento, que, según las mismas fuentes, presentaba señales evidentes de malos tratos, aunque no había presentado denuncia alguna.

Trasladada a un centro médico, los facultativos dictaminaron que la supuesta víctima sufría rotura de mandíbula y la fractura de dos costillas.

La mujer explicó que un conocido suyo, dueño de un bar situado en l calle Fernán González, le causó las lesiones durante la noche del viernes al sábado pasado.

Según relató, estuvo en el establecimiento con el propietario y dos amigos hasta que Carlos de la Peña Gilarte cerró el local, circunstancia que aprovecharon los cuatro para ir a una discoteca, donde permanecieron hasta la madrugada.

Posteriormente, regresaron de nuevo al inmueble del detenido, pero sus dos amigos se despedieron poco después. Al quedar solos, el presunto agresor propuso a su compañante relizar el acto sexual, pero ante la negativa, la agredió y retuvo contra su voluntad durante varias horas, hasta que logró escapar.

TRAFICO DE HEROINA

Por otra parte, hoy pasaron a disposición judicial José Luis Cristóbal Civera, de 29 años; Lisardo Carbonel Montoya, de 31, y Carmen Motos García, de 30, acusados de tráfico de drogas, según informaron las mismas fuentes policiales.

En las chabolas donde residen, en el madrileño barrio de La Celsa, agentes de la comisaría de Carabanchel intervinieon, durante el registro realizado con mandamiento judicial, 168 gramos de heroína y dos balanzas de precisión.

Lisardo Carbonel posee siete antecedentes policiales, el último también por tráfico de drogas, mientras que José Luis Cristobal, que tiene pendiente una reclamación judicial, ha estado detenido en 16 ocasiones.

Finalmente, la Jefatura Superior de Policía señaló que el valor de las alhajas robadas durante la noche del pasado lunes en una joyería situada en el número cinco de la calle San azario asciende a siete millones de pesetas.

El cierre metálico de la tienda presentaba señales de fuerza y los cables del sistema de alarma aparecieron cortados.