Los detenidos en Fuerteventura, Lanzarote y Gran Canaia regentaban bazares con material de procedencia ilegal, son 16 súbditos de India, 2 españoles y 1 irakí.

Las investigaciones se iniciaron a raíz de las denuncias interpuestas por representantes de la empresa Nintendo y de la Asociación Española de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento (ADESE), ante la existencia de videojuegos y programas informáticos que estaban siendo comercializados sin la debida autorización de los titulares de los derechos.

Las primeras investigaciones d la Guardia Civil determinaron que esta actividad ilícita se estaba desarrollando en diferentes establecimientos comerciales y Ciber-cafés situados en las islas de Fuerteventura, Lanzarote y Gran Canaria.

Seguidamente, y con el objetivo de no levantar sospechas, se llevaron a cabo varios registros e inspecciones coordinadas en dichos establecimientos, en los que se consiguió intervenir más de 3.000 cartuchos para videojuegos que contienen un número variable entre 50 y 150 juegos.

Igualmente, se ha incautado 28 ordenadores, 330 juegos "pirateados" por la red para ser copiados o utilizados en los ciber-cafés, 49 programas informáticos y 26 discos compactos conteniendo copias ilegales de juegos.