El vertido, que produjo una coloración anormal del agua, afectó a la denominada gravera de Villafranca, acualmente en periodo de recuperación por parte del Ayuntamiento.

Según fuentes municipales, las investigaciones han determinado que el vertido procede de la planta de productos asfálticos Asfalpasa, a través de una zanja por la que vertía gran cantidad de agua, seguramente procedente del lavado del asfalto.

Aunque fuentes de la empresa han negado la contaminación de las aguas procedentes de este tipo de lavados, los Servicios de Vigilancia Ecológica aseguran que el proceso sí produce contaminación

Esta empresa ya fue denunciada por el mismo motivo hace aproximadamente dos años, ante la degradación de la flora, de la fauna y en general del entorno. En aquella ocasión la dirección de Asfalpasa se comprometió a eliminar los vertidos y recuperar el ecosistema.

Los Servicios de Vigilancia Ecológica del Ayuntamiento han recogido muestras y fotografías del vertido, por si fuera necesario cursar una denuncia ante la Agencia de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid.