MADRID

DESMANTELADAS VARIAS ORGANIZACIONES DELICTIVAS CHINASQUE OPERABAN EN MADRID

- La policía detiene a 27 personas en distintos puntos de la comunidad madrileña

MADRID
SERVIMEDIA

Un total de 27 personas han sido detenidas por la Policía Nacional en el transcurso de una operación desarrollada en varias localidades de la Comunidad de Madrid, que se ha saldado con la desarticulación de varias redes criminales que se dedicacaban a introducir ilegalmente en España ciudadanos de origen chino.

Las investigaciones se iniciaron a raíz de las gestiones practicadas en el barrio de Carabanchel de Madrid, en donde se producía un trasiego constante de ciudadanos de origen chino en zonas concretas.

En un piso de este distrito, un grupo de orientales se dedicaba a la reproducción, almacén y venta de material fonográfico y videográfico en soportes físicos (CD y DVD).

Allí fueron detenidos tres individuos chinos que estaban de forma ilegal en España e intervenidos numerosos efectos utilizados en las defraudaciones y copias que alcanzaban en el mercado una cantidad valorada por los peritos de la SGAE en 384.500 euros. Asimismo, fueron detenidos los máximos responsables de la organización, como autores de un delito contra la propiedad intelectual e industrial.

Los arrestados distribuían el material copiado a distintas capitales de provincias, tales como Murcia, Vitoria, Sevilla, Pontevedra, Pamplona, Salamanca, Cuenca o Badajoz. En esta ciudades disponían de la infraestructura necesaria para el almacenamiento y posterior venta del material, motivo por el que se continúan con las gestiones para la localización y detención de los distribuidores.

REAGRUPACIÓN

Por otra parte, agentes de la Dirección General de la Policía adscritos a la UCRIF Central y a la Brigada Provincial de Extranjería de Barcelona han detenido a una mujer, de nacionalidad china, que reagrupaba ilegalmente menores de edad procedentes de su país.

Las investigaciones se iniciaron a raíz de las informaciones facilitadas por el Consulado General de España en Shanghai (China), en las que se alertaba que en la misión diplomática había sido solicitado unvisado, para la reagrupación familiar de un menor. Enseguida se vieron indicios que apuntaban a que la documentación aportada para certificar el parentesco entre el familiar reagrupante y el menor, al que se pretendía reagrupar, había sido falsificada.

Tras la entrevista mantenida por los funcionarios del Consulado, como trámite previo para la concesión del visado, el menor manifestó que en su deseo de emigrar a España había contactado con una persona, muy conocida, en la ciudad de Quingtian (China). Esta última le explicó que podía emigrar de manera ilegal a España, tramitando una falsa reagrupación familiar con un padre supuesto, que se encontraba ya en nuestro país residiendo legalmente.

Para ello, tenía que abonar unos 12.000euros, cantidad que debía entregar en dos partes; por un lado 4.000 euros,para iniciar la falsificación de documentos en China, yposteriormente 8.000 euros, cuando estuviera ya de forma legal en España.

Identificada la persona que figuraba como solicitante de dicha reagrupación en España, se averiguó que la misma había participado con anterioridad en otros tres trámites de reagrupación a favor de menores de edad. Todos ellos fueron resueltos positivamente al haber falsificado la documentación, encontrándoseactualmente en nuestro país. Dos de los reagrupados pudieran ser los hijos legales de la persona que figuraba como reagrupante.

Por todo ello fue detenida una mujer, Meizhu Z., de 46 años, natural de Zhejiang (China), domiciliada en la C/ Navacues nº 1-B de Madrid, como responsable de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. Fue la encargada de aportar sus datos personales y de realizar las diferentes gestiones con la Administración para reagrupar de forma fraudulenta a menores de edad haciéndoles pasar por hijos legales.

La detenida reconoció en todo momento haber realizado dichas actividades y todos los trámites necesarios para reagrupar a dos menores de edad a los que hizo pasar por hijos suyos. Uno de ellos, se encuentra actualmente en España en paradero desconocido. Las reagrupaciones las había iniciado después de que una compatriota suya, residente en Barcelona, se las hubiera solicitado.

La Policía también ha desarticulado en Madrid una red dedicada al tráfico ilegal de ciudadanos chinos a diferentes países. Para ello se valían de pasaportes falsificados de diferentes países asiáticos.

Las investigaciones se iniciaron en el mes de junio de pasado año a raíz de los datos facilitados por la Oficina Central Nacional de Interpol España. Estas informaciones señalaban la existencia de una organización criminal internacional, dedicada al tráfico de seres humanos desde China a terceros países, entre ellos España, Estados Unidos de Norteamérica, Canada o Sudáfrica.

Las gestiones realizadas dieron como resultado la localización de dos domicilios utilizados por la organización que operaba en España, donde obtenían la cobertura necesaria. Ambas viviendas estaban situadas en las proximidades de la Gran Vía madrileña.

Asimismo, se tuvo conocimiento de que los diferentes miembros de la red en España recibían regularmente grandes cantidades de dinero desde China, con las que financiaban sus actividades ilícitas. Desde el año 2004, habrían recibido 300.000 euros, dinero procedente en su totalidad del tráfico de seres humanos. Estas cantidades eran reinvertidas de nuevo en las mismas actividades para obtener mayores beneficios.

En uno de los domicilios localizados se encontraban retenidas un número indefinido de víctimas, quienes estaban a la espera de ser enviados a sus destinos finales de forma inmediata.

Como resultado de los registros realizados en dos domicilios de Madrid, fueron detenidas catorce personas, todas ellas de origen chino, entre los que se encontraban diferentes miembros de la organización radicada en España. -

Las víctimas eran introducidas en España, utilizando diversas vías, con documentación falsificada. Una vez en Madrid, permanecían recluidos en domicilios relacionados con la organización, hasta dar el salto final a los lugares de destino, momento en que les proporcionaban la documentación necesaria, así como los billetes de avión, dinero en efectivo y eran aleccionados para no levantar sospechas a las autoridades policiales de fronteras.

En todo momento iban acompañados de miembros de la organización, quienes realizaban las funciones de control sobre las personas traficadas, así como de guías durante el trayecto realizado desde los domicilios hasta los países elegidos como destino final.

Las condiciones en las que la organización mantenía en España a las personas con las que traficaban eran lamentables, hacinados en pisos insalubres, llegando incluso a vivir trece personas en unode menos de cincuenta metros cuadrados, durmiendo en sacos tirados en el suelo y alimentándose únicamente de arroz.

La organización desarticulada tenía ramificaciones, además de en España, en terceros países, siendo en la República de China, más concretamente en la región de Fujian, donde se captaba a las víctimas, para posteriormente trasladarlas a la República de Sudáfrica, México y Canadá, a través de España.

Finalmente, en el caso de las mujeres eran explotadas laboral o sexualmente, hasta saldar la deuda contraída, estimada en unos veinte mil euros (20.000 €) por persona.

Se estima que durante el último año y medio, dicha organización habría traficado con aproximadamente trescientos ciudadanos chinos. El beneficio económico obtenido estaría próximo a los seis millones de euros, en dicho periodo.

(SERVIMEDIA)
11 Mar 2006
JRN