Así lo señalaron el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, y la secretaria de Empleo de CCOO, Lola Liceras, tras el encuentro mantenido esta mañana con el secretario general de Empleo, Juan Chozas, para hablar sobre la reforma del desempleo, que concluyó con un nuevo fracaso.

En el encuentro, que duró sólo veinte minutos y que fue calificado de "decepcionante" por los sindicatos, Chozas dejó claro que l Gobierno no va a retirar su documento, mientras que los sindicatos fueron tajantes al afirmar que ante esta reforma "sólo cabe una salida: una respuesta unitaria, masiva y democrática, en la que no se descarta una huelga general".

Chozas señaló que no cabe descartar nuevas reuniones con los sindicatos, pese a que UGT y CCOO creen que el Gobierno ha dado "un carpetazo" a la negociación y dan prácticamente por cerrada la discusión. Liceras y Ferrer reiteraron que no entrarán a discutir las propuestas el Gobierno, "que suponen recortes claros de las prestaciones" y que están en las Antípodas de las suyas.

Insistieron en que el Gobierno conoce las propuestas de UGT y CCOO para reformar el desempleo, y destacaron que el Ejecutivo no tiene "ninguna voluntad de discutir con nosotros", como demuestra, según Liceras, el documento que ha remitido a las comunidades autónomas que contempla un nuevo contrato de inserción.

Según Liceras, este nuevo contrato cambia la naturaleza del contrato de inserción ctual, sólo se utiliza en el sector público y por entidades sin ánimo de lucro, ya que se quedaría como un nuevo contrato para que el parado adquiera formación, cuando ya existen para ello los contratos de prácticas y formación.

A juicio de Ferrer, este nuevo contrato se convierte en "un potente cañón para desmembrar más el tejido laboral español". Además, según Ferrer, en el documento enviado a las comunidades autónomas tampoco queda claro cuál va a ser la naturaleza de los servicios públicos de emplo, no descartándose la entrada de la iniciativa privada, ni se refleja el papel de los interlocutores sociales.

Sobre este documento, Chozas dijo que se refiere a los servicios públicos de empleo y que no es un documento definitivo. Indicó que se lo enviarán a los sindicatos cuando esté un poco más concretado. Chozas celebrará un cumbre con las comunidades autónomas el próximo día 20 para hablar sobre el desempleo.

Los responsables sindicales presentarán el próximo jueves las medidas de protesta ue llevarán a cabo contra la reforma del desempleo, entre las que no descartan la huelga general. "Nuestro fin no es esta huelga general, sino el restablecimiento de la negociación y que el Gobierno desista de una imposición unilateral", aclaró Ferrer.

Para los sindicatos, "no se ha terminado la negociación, proque no se ha empezado", según dijo Liceras, quien informó que esta mañana el ministro Aparicio ha llamado a los sindicatos para decirles que las posibilidades de negociación son muy pequeñas y ue el tiempo es muy corto.

ESTRATEGIA SINDICAL

Por su parte, Chozas indicó que el Gobierno sigue manteniendo su voluntad de diálogo, y dijo que el proceso de diálogo y el documento del Ejecutivo siguen abiertos. Aseguró que hasta la fecha no han recibido en esta mesa de negociación ninguna propuesta alternativa de los sindicatos, aunque reconoció que los representantes de los sindicatos han aludido a documentos presentados en otras mesas para otras finalidades.

No quiso entrar a calificar la acitud de los sindicatos y la posible convocatoria de una huelga general contra la reforma del desempleo, pero insinuó que decisión de llevar a cabo estas movilizaciones y está tomada, con independencia del resultado de las negociaciones, porque responde a otro tipo de intereses.

"Ya desde hace varios días parece que va tomando cuerpo una estrategia que tiene sus fechas, sus razones o motivos que tampoco cuando se comparan con el documento uno alcanza a encontrarlos. Entonces, parece que ahí hay una estategia, una decisión independiente de lo que podamos esforzarnos en las propuestas concretas en esta mesa", declaró.

Chozas, que dijo que al Gobierno le gustaría que la reforma estuviera lista "cuando hubiera consenso", dejó claro que el Ejecutivo no retirará su documento porque llevar a cabo esta reforma es su responsabilidad y porque "no recorta el esquema general de derechos".

Insistió en que la iniciativa sobre qué cuestiones se deben reformar para un mejor funcionamiento del mercado laboral es una responsabilidad absoluta y plena del Gobierno", que si no se lleva adelante podría interpretarse como "una dejación del mandato que los españoles depositaron en él para que las cosas funcionen lo mejor posible".

"El Gobierno puede invitar a negociar, pero no obligar", dijo Chozas, quien reiteró que la oferta de diálogo sigue abierta. Además de con los agentes sociales y las comunidades autónomas, Chozas se reunirá también con el Sindicato Obrero del Campo (SOC), la organización agraria Coag, elsector de la economía social y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), porque "no vamos a limitar ni reducir estos intentos de recibir aportaciones e intercambiar ideas".