Respecto al Bachillerato, la bajada fue más significativa, ya que el porcentaje actual es un 11 por ciento más bajo que el obtenido hace dos cursos.

Según la Conferencia Episcopal, en el Bachillerato se produce "la mayor discriminación a la enseñanza religiosa católica: las notas e religión no son tenidas en cuenta para el acceso a la Universidad y los alumnos que no eligen religión realizan actividaddes de estudio no evaluables y con todo tipo de dificultades académicas para ser impartidas".

En total, en los centros públicos asisten a esta asignatura el 70 por ciento de los alumnos. Además, el 50 por ciento de los alumnos que van a ser maestros han elegido, entre las optativas, "Religión católica y su pedagogía".

En las escuelas universitarias de titularidad eclesial el 7 por ciento de los estudiantes que aspiran a ser profesores eligen de optativa la religión.

Finalmente, en los centros privados de titularidad civil se mantienen los porcentajes de cursos anteriores, ya que el 85 por ciento de los alumnos eligen la asignatura.