En la operación, puesta en marcha el pasado mes de septiembre, han resultado detenidas cinco personas (R.M.G., N.C.S., J.A.M.S. y C.G.M., españoles de entre 28 y 36 años, y D.A.D., búlgara de 44 años) e imputadas otras cuatro, con edades comprendidas entre los 29 y los 52 años. Se estima que la droga intervenida una vez adulterada podría haber alcanzado en el mercado unas 20.000 dosis.

El centro neurálgico de las operaciones de este grupo era un bar ubicado en Galapagar regentado por R.M.G. y N.C.S., donde al parecer se realizaban falsas reservas como clientes para comer, cuando en realidad significaban las citas de la entrega de droga.

Además, la Guardia Civil ha intervenido diversos botes y un mechero a los que se les había practicado un doble fondo donde ocultaban la cocaína, y que utilizaban para trasladarla desde el domicilio hasta el bar, lugar donde era distribuida.

El operativo policial permitió localizar a varias personas domiciliadas en distintos municipios serranos que habían tejido un entramado para la adquisición de cocaína, bien con contactos que establecían en Galicia o bien a través del aeropuerto de Barajas. Tras ser sometida a diferentes procesos de adulteración, la droga era distribuida después en la sierra.

La culminación de la operación tuvo lugar poco antes de las pasadas Navidades, impidiendo de esta forma la distribución que tenían prevista durante las fiestas, si bien la Guardia Civil mantuvo el operativo en marcha hasta esta última semana para poder desarticular todo el entramado establecido.

En los registros practicados, la Guardia Civil intervino 600 papelinas de cocaína de un peso total de 1.300 gramos, 200 "rulos" (utilizados por los boleros) de unos 400 gramos de cocaína, dos botes de refresco y uno de spray con doble fondo, cuatro vehículos, 9.000 euros en billetes fraccionados y dosbásculas de precisión.