La operación, denominada "Esportón", se inició hace varios meses cuando la Brigada de Extranjería y Documentación de Badajoz tuvo conocimiento de la existencia de un grupo de organizado dedicado a la falsificación de documentos.

Los rumanos detenidos, que falsificaban permisos de conducir de su país, así como seguros y placas de vehículos y certificados de ITV, traían mediante engaños a compatriotas suyos a la comarca de Tierra de Barros para trabajar en la recolección de aceituna y uva.

De esta forma, los ahora detenidos lograron captar a unos 50 ciudadanos rumanos, que también han sido arrestados, para trabajar en la citada comarca por unos cinco euros al día.