Según informó hoy la Dirección General de la Policía,los agentes localizaron en Reus (Tarragona) a Alonso C.R., conocido como "Antonio", y principal responsable de la organización delictiva.

El detenido contaba en Colombia con un enlace, que era el encargado de captar mujeres jóvenes en distintos países de Latinoamérica, a quienes ofrecían la posibilidad de obtener cantidades de dinero importantes. Una vez en España eran conducidas a distintos clubes de alterne radicados en Cataluña y obligadas a ejercer la prostitución bajo un férreo control.

La legada a España se producía a través de otro país del espacio Schengen, donde franqueaban el control policial simulando un viaje turístico por diversas capitales españolas.

A través de estos países viajaban a Madrid o Barcelona, siendo recibidas por integrantes de la red y trasladadas a sus domicilios, en donde se les retiraba el billete de avión de regreso y los 3.000 dólares que les habían dado para entrar en el país.

Los beneficios obtenidos mensualmente por los titulares de los locales asciendn a unos 6 millones de pesetas, una vez descontados los gastos.

El control de las mujeres se realizaba por los encargados, a través de un férreo sistema de explotación cuyas normas figuraban en un documento que fijaba las condiciones laborales por las que habrían de regirse y cuyo incumplimiento era sancionado con multas que oscilaban entre 5.000 y 20.000 pesetas por cada falta cometida.