Se trata de Mrwan Kajo, ciudadano sirio de 35 años, que llevaba un pasaporte falso a nombre de Pedro Joao Fatuda Fortes; Radwan Hassou Abdallah, iraquí de 35 años, y María Dolores Lucio Martínez, española de 34 años.

A los dos primeros, que la Guardia Civil considera los jefes en España de la red desarticulada, se les ocuparon 38 kilos de heroína en un piso que habían alquilado en la calle Laurel de Madrid, en el distrito de Arganzuela. En otros dos pisos más, que también ocupaban en las calles General Pardiñas y enorca, los agentes encontraron diversa documentación que prueba su conexión con las mafias turcas.

La droga intervenida presenta las características propias de la producida en el mencionado "triángulo dorado" y se presume que ha sido transportada a España a través de la "ruta de los Balcanes".

La heroína era distribuída desde Madrid a diversos puntos de España, entre ellos Bilbao, lugar al que se dirigía la española detenida, que hacía de correo para los anteriores y que portaba medio kilo de diha droga en el momento de su detención.