La operación, desarrollada por agentes de Palma de Mallorca y Reus, se ha saldado con la detención de 17 personas, entre los que están ciuddanos albaneses, rumanos y españoles. La red también se dedicaba al robos en domicilios y de vehículos.

Asímismo, el Cuerpo Nacional de Policía se ha incautado, de pasaportes retenidos a mujeres dedicadas a la prostitución, gran cantidad de joyas procedentes de robos en varios pisos de la Comunidad catalana, ocho sellos falsos de entrada en el territorio del espacio Schengen a través de Alemania, equipos de música sustraídos en vehículos, teléfonos móviles, pasaportes falsos de Grecia, Eslovaquia y Liuania, así como numerosos permisos de conducir lituanos en blanco listos para su adulteración.

Según el Ministerio del Interior, los investigadores han localizado a varias de las mujeres introducidas en España por la red, bajo la promesa de un trabajo digno. Posteriormente, les obligaban a prostituirse, les retiraban el pasaporte, las maltrataban si se resistían a mantener relaciones sexuales con los clientes y les quitaban el dinero que ganaban.