Fuentes policiales informaron a Servimedia de que a las 8:55 la Policía recibió un aviso desde la compañía eléctrica, en el que se informaba de la localización de dos maletines que no eran reconocidos por los empleados.

Esta comunicación dio lugar al envío a la sede de la empresa de diversos efectivos policiales, entre ellos expertos en la desactivación de explosivos, que procedieron, en primer lugar, a desalojar a los empleados.

A continuación, los agentes inspeccionaron las instalaciones y analizaron los maletines encontrados, que finalmente sólo contenían sendos ordenadores.

Tras estas actuaciones, la Policía autorizó a los trabajadores de la compañía eléctrica a entrar nuevamente en la sede de Endesa, que habían abandonado a primera hora tras la llamada de aviso a las Fuerzas de Seguridad.