Un portavoz de la junta de personal señaló que la habitación 231 de este hospital público, en la que fue ingresado el padre de la ministra, ha sido remodelada "de arriba a abajo", han cambiado los sanitarios. Además, el paciente no comparte la habitación con nadie, cuando lo normal es que esté ocupada por tres efermos.

María Meijide, presidenta de la junta de personal del hospital, manifestó a la Cadena Ser que se ha hecho "un recambio de todas las piezas del cuarto de baño. Cama totalmente nueva y articulable. Cortinas en la habitación y en el cuarto de baño. Mueblería, sofás reclinables nuevos, esto todo visto por nosotros".

Meijide señaló que le parece muy bien ese tratamiento, "siempre que se haga para todos los usuarios de la sanidad pública". Añadió que "en esa habitación donde él está sólo es unahabitación de dos camas y que el 90 por ciento de los días del año está ocupada por tres camas".

Por su parte, la dirección del hospital se ha limitado a señalar en un comunicado que se tomaron las medidas necesarias para el mejor cuidado del paciente. La nota no desmiente las denuncias sindicales.