Estos pesqueros, la mayoría españoles, realizan sus capturas con motores y artes prohibidos en aguas del Guadiana, donde a menudo capturan especies cuya pesca está prohibidaque se encuentran en veda, según las fuentes consultadas.

El presidente de la Cofradía de Pescadores de Ayamonte, José Albarrán Brito, ha expresado su esperanza en que se halle una pronta solución a este problema y anunció que las administraciones competentes se reunirán próximamente para tratar el asunto.

Albarrán Brito destacó que hace unas semanas el número de embarcaciones clandestinas en el Guadiana se había reducido de forma importante durante los últimos meses, pero en los últimos días ha regresado a la zona un importante grupo de pesqueros que se sitúan en zonas cercanas a la antigua aduana entre Ayamonte y Vila Real de Santo Antonio, así como en las proximidades del puente internacional sobre el río Guadiana.

El presidente de la Cofradía de Ayamonte ha denunciado en reiteradas ocasiones que la pesca furtiva puede ocasionar importantes daños para la conservación de la fauna marina del Guadiana.

Durante los últimos años han sido frecuentes los incidentes entre pescadores españole y la Policía Marítima de Portugal, ya que este tipo de embarcaciones ilegales se adentran en ocasiones en aguas jurisdiccionales lusas.