Los viajes de los equinos, según informó hoy en un comunicado "Handle with care", no cumplen con la legislación comunitaria sobre bienestar de los animales durante el transporte.

Esta entidad recordó que los caballos son criados para el consumo de carne en las comarcas pirenaicas de Cataluña, Aragón, Navarra y en las montañas del País Vasco.

Indicó que no existen suficientes mataderos en esas zonas para sacrificarlos, "por lo que el ganadero, muy a su pesar, se ve obligado a colocar (a estos animales) en Italia, el principal mercado europeo, donde la carne de caballo es muy popular, sobre todo en el sur, y es fácil de encontrar en restaurantes y tiendas de alimentación".

"Handle with care" señaló que el Reglamento 1/2005 del Consejo de la Unión Europea establece que el tiempo máximo del transporte de caballos debe ser de 24 horas, aunque cada ocho horas tienen que ser abrevados y, si es necesario, alimentados dentro del camión. Además, los animales deben viajar en compartimentos individuales para evitar caídas y pisotones entre ellos.

"Sin embargo, ésta no es la realidad en el transporte de caballos entre España e Italia. En numerosas ocasiones, los caballos son transportados durante más de 32 horas sin descansar ni parar para aportarles agua y comida", aseguró "Handle with care".

Además, esta plataforma afirmó que, "en ocasiones, los servicios veterinarios oficiales aprueban hojas de ruta con estimaciones de duración de viaje que no son realistas, aceptando y sellando propuestas de menos de 24 horas para viajes imposibles de realizar en menos de 30 o 35 horas".

Por ello, "Handle with care" propone la progresiva sustitución del comercio de caballos vivos por el sacrificio de los animales en su lugar de origen.