Se trata de una encuesta hecha en Reino Unido pero cuyos datos, según sus autores, se pueden extrapolar a otros países europeos del entorno, también a España.

El buscador informó de que un 81% de los casi 14.000 encuestados reconoció haber esperado en vano la entrega de artículos online, mientras que hasta un 60% reconoció haber recibido un producto equivocado o en malas condiciones.

Asimismo, el estudio demostró que la espera de la entrega supone a menudo la necesidad de pedir permiso en la oficina y que tan solo el 41% de las mujeres y el 35% de los hombres dicen la verdad para ausentarse del trabajo y esperar su compra online.

Los trabajadores y empleados reconocen sentirse frustrados por la ausencia de productos en el stock (18%) y la falta de un comercial que apoye la venta online (16%). Además, los usuarios se quejan del retraso en el envío de los productos adquiridos (10%) y de las malas condiciones en las que en ocasiones llegan los mismos (16%), así como de la falta de claridad sobre el precio total de la compra (16%).