Durante 1993 fueron 4.469 las familias que se dirigieron a Cáritas por primera vez y el 21 por ciento lo hicieron para conseguir algún trabajo.

Según los responsables de Cáritas diocesana de Barcelona, la situación del año1994 ha empeorado en comparación con el año anterior, marcado por el paro, "sintoma, causa y efecto ahora de una desorientación general".

"Por todo ello", afirma el delegado episcopal de Cáritas, Joan Ventosa, "no es estraño que ante este panorama el conjunto del servicio de Cáritas diocesana de Barcelona haya aumentado en un 25 por ciento".

El presupuesto de Cáritas diocesana de Barcelona para este año (1.195 millones de pesetas) por primera vez ha bajado en comparación con el año pasado (1.213 illones de pesetas).

Desde enero a finales de mayo 875 familias han pedido a Cáritas Barcelona este tipo de ayuda, mientras que en el mismo periodo del año pasado el número era de algo más de 500 familias. Los responsables de esta entidad prevén que este año reciban solicitudes de ayuda de unas 2.100 familias necesitadas.

Cáritas Diocesana de Barcelona quieren continuar con el objetivo de incorporar a la sociedad a las personas excluídas, según explicó Pilar Malla, directora de esta entidad en Bacelona, en la presentación del Plan de Acciones Sociales para 1994.

El presupuesto se distribuirá en tres grandes proyectos: un 25 por ciento en el programa para la vejez, un 13,5 por ciento en el programa para la infancia y un 13 por ciento en el proyecto para solventar el paro.

Estos programas financiados por Cáritas se dirigirán también a los servicios de extranjería, vivienda, drogodependencias y ayudas económicas.