No obstante, el incremento de la demanda es inferior al registrado antes de las vacaciones de verano y se sustenta en la mejora de las peticiones de crédito de comercios y pequeñas y medianas industrias. También, en menor medida, de los préstamos solicitados por particulares.

Por el contrario, las grandes empresas redujeron su demanda de créditos, especialmente en el País Vasco y norte de España, lo que podría estar relacionao con la crisis de los sectores industriales ubicados en esa zona.

Para el BBV, lo más significativo de la situación económica es el estancamiento del crecimiento del PIB en el 2,5 por ciento, sin que haya producido la recuperación augurada por numerosos expertos tras el fin de la guerra del Golfo.

El BBV considera que la posibilidad de un descenso de los tipos de interés se ha visto reducida por el elevado crecimiento de las magnitudes monetarias, aunque podría darse "si la tendencia bajista de a inflación se consolida en los meses de venideros".