Delphi Packard cuenta con cuatro centros de trabajo en España, ubicados Tarazona y Belchite, en Zaragoza, Pamplona y Olvega (Soria), que suman cerca de 3.350 trabajadores. La intención de la empresa era fusionar la actividad de las dos factorías de Zaragoza y cerrar la planta de Tarazona, contemplando el despido de unos 1.900 trabajadores, según los sindicatos.

Tras el acuerdo lograd ayer, la empresa abandona esta idea y accede a negociar un plan industrial de futuro, comprometiéndose a que, si una vez definida la plantilla óptima en el plan, se decide que hay un excedente de personal, se abonaría una indemnización de 85 días por año trabajado sin tope de años para los trabajadores que voluntariamente soliciten la baja de la empresa.

Además, como garantía de cumplimiento del plan de futuro, Delphi aporta un aval económico que asegure la futura indemnización en caso de que se puedn producir despidos colectivos motivados por circunstancias ajenas al contenido del plan y derivados de la evolución del mercado, que sería también de 85 días por año.

La dirección de Delphi Packard se ha comprometido también a hacer indefinidos a los trabajadores con contrato temporal que llevan más de dos años en la empresa, que son unos 800-900, según los sindicatos.