Estos encierros se suman al encierro permanent que desde el martes de la semana pasada mantienen los trabajadores de Cartagena, que se oponen a la pretensión de Enagás de paralizar la actividad de la planta de regasificación.

Según UGT y CCOO, Enagas quiere parar esta planta porque no es rentable, al haber cerrado su principal cliente, que era Fesa-Enfersa. La planta es una instalación nueva y en buen estado que lleva funcionando sólo cinco años.

Sin embargo, los sindicatos proponen que la planta sea conectada a la red nacional de gaseoducto por Orihuela (Alicante), lo que "permitiría la gasificación de toda la región murciana y la supervivencia de la planta con un margen de rentabilidad normal", según indicaron a Servimedia fuentes sindicales.

Las mismas fuentes aseguraron que si la empresa mantiene esta actitud y sigue bloqueando la negociación colectiva los sindicatos convocarán una huelga de 24 horas en todas las empresas de Enagás, que se realizará entre el 15 y el 20 de este mes. No descartan convocar a esta huelga también a las emresas del grupo Repsol, donde la negociación colectiva también atraviesa dificultades.

La huelga de Enagás, que afecta a unos 1.000 trabajadores, podría tener importantes consecuencias, ya que la empresa suministra gas a actividades que son ininterrumpibles. Enagás suministra gas a grandes empresas industriales y a otras empresas de distribución que a su vez lo suministran a particulares.

En materia de negociación colectiva, los sindicatos piden una subida salarial para este año 1,5 puntos por enima del IPC, mientras la empresa ofrece un incremento cero. UGT y CCOO piden también una reforma del sistema de promoción que hay en la empresa y una ligera reducción de la jornada laboral.