La manifestación estaba prevista para las 11 de la mañana del próximo día 31 y durante la misma los participantes querían entregar un escrito al presidente del Congreso, Félix Pons, reivindicando estatutos de autonomía para las dos plaas norteafricanas.

Los dos senadores pidieron personalmente a la Delegación del Gobierno permiso para celebrar el acto, pese a estar prohibidas las manifestaciones en las inmediaciones del Parlamento.

Según la Delegación del Gobierno en Madrid, "la concentración incurre en la prohibición a que hace referencia el artículo 77.1 de la Constitución española cuando dice: 'Las Cámaras pueden recibir peticiones individuales y colectivas siempre por escrito, quedando prohibida la presentación directa pormanifestaciones ciudadanas'".

Además, a juicio de los responsables gubernativos, "dado que el Congreso de los Diputados estaría reunido en sesión ordinaria en el día y hora indicados para la concentración, es de aplicación el artículo 150 del Código Penal, que castiga con la pena de confinamiento a quienes 'promovieren, dirigieren o presidieren manifestaciones u otra clase de reuniones al aire libre en los alrededores del Palacio de las Cortes cuando estén reunidas'".