El profesor Thielcke basa su afirmación en los resultados del censo realizado recietemente entre las 145 especies de aves que crían en los alrededores del lago de Constanza, es decir, en Suiza, Austria y Alemania.

Las aguas del lago de Constanza están consideradas como uno de los hábitats más importantes de Europa para las aves nidificantes e invernantes.

Según Thielcke, el último censo revela que el número de aves que migran cada año largas distancias en dirección a Africa está disminuyendo considerablemente, tales como la golondrina común, la curruca zarcera y el mosquitero msical.

Esta situación también la sufren las especies que crían en los campos y praderas, como la alondra común, la tarabilla norteña y la avefría, y aquellas cuyo hábitat son los cultivos abiertos, como el torcecuello, el pardillo común y el colirrojo real.

A juicio del ornitólogo alemán, la amenaza que sufren estas especies "muestra la urgencia de incluir plenamente la directiva comunitaria para la protección de las aves del año 1979 en las legislaciones nacionales, ya que hasta ahora esto no haocurrido en ningún Estado miembro de la CE".

El Fondo Patrimonio Natural Europeo mantiene que si la legislación comunitaria no es integrada en las nacionales persistirá la progresiva degradación que durante los últimos años está asolando a las dehesas españolas, los olivares de Grecia y los frutales alemanes.

Asimismo, ha denunciado la acción negativa que ejercen sobre las aves nidificantes y migradoras los monocultivos, ya que "no ofrecen hábitats adecuados".