EL DEFENSOR DEL PUEBLO INVESTIGA LAS REDADAS PARA EXPULSAR NIÑOS MARROQUIES DE CEUTA

MADRID
SERVIMEDIA

El Defensor del Pueblo ha abierto una investigación de oficio para averiguar si las redadas efectuadas por la Policía Local de Ceuta para expulsar de la ciudad a niños marroquíeshan respetado las debidas garantías jurídicas.

La investigación se inicia como consecuencia de la denuncia que presentó la semana pasada la Asociación para los Derechos del Niño y de la Niña (Prodeni) ante el Ministerio de Interior y la Secretario General de Asuntos Sociales.

Según Prodeni, la Policía Local de Ceuta ha incurrido en malos tratos y torturas a niños magrebíes en las redadas que realiza para "limpiar" la ciudad de inmigrantes menores de edad indocumentados.

La información faciliada por Prodeni se basa en los testimonios y escritos de tres policías locales de Ceuta, Antonio Espinosa, Juan Luis Ramos y Manuel Navia, que denunciaron el caso ante la Fiscalía de Ceuta. Según la asociación de protección de la infancia, los tres han sido amenazados y castigados con la separación del servicio.

El Defensor del Pueblo ha puesto la denuncia en conocimiento del fiscal general del Estado, para que determine si los hechos pueden derivar en algún tipo de responsabilidad y que ejercite, denro de sus facultades, la tutela de estos menores ante su posible desamparo, ya que las autoridades españolas han podido incumplir la Convención de Derechos del Niño de 1989 y la propia Ley Orgánica de Protección Jurídica del Menor.

Asimismo, se ha dirigido al delegado del Gobierno en Ceuta para que el Cuerpo Nacional de Policía asuma sus competencias, en materia de derechos y libertades de los extranjeros, tutelando igualmente a los menores afectados.

MALAS CONDICIONES

Prodeni mantiene que, segn el testimonio de los tres agentes, la Policía "almacena" a los indocumentados, tanto niños como adultos, en el garaje del Cuerpo, en furgones destinados a trasladar motocicletas, verduras y pescados decomisados.

"El furgón tiene un pequeño rectángulo con agujeritos para respirar, está sucio y allí se van hacinando, pudiendo estar hasta siete horas seguidas sin recibir alimentos ni agua, en condiciones físicas y psíquicas muy lamentables", indica.

Uno de los policías afirmó que fue testigo de cóo se llevó al puesto fronterizo desfallecido y en tan malas condiciones que la policía de Marruecos se negó a admitirlo. Entonces la Policía Local regresó con él en el furgón y lo soltó en las calles, para no hacerse cargo de él.

Coincidiendo con la información facilitada por Prodeni, la reponsable de Migraciones de Izquierda Unida (IU), Susana López, denunció que las redadas policiales contra menores en Ceuta infringen el ordenamiento jurídico y se sirven de "métodos de todo punto reprobables en un Etado democrático".

(SERVIMEDIA)
20 Nov 1998
GJA