Pese a que las instalaciones de este centro se encuentran ya en Majadahonda, los pacientes que precisan diálisis siguen recibiéndola en el hospital antiguo, ya que el agua de las máquinas del nuevo contiene niveles elevados de cloro y no es apta para este tratamiento.

Ante esta situación, Defensa de la Sanidad Pública exigió en un comunicado las dimisiones de los responsables, "empezando por el propio consejero y una rectificación de una política que se está convirtiendo en uno de los principales riesgos para la salud de la población de la Comunidad de Madrid".

A juicio de esta asociación, la situación del Puerta de Hierro "es una demostración en la práctica de los problemas que ya se habían señalado en este modelo de gestión semiprivado, en el que se anteponen los intereses económicos a la calidad de las prestaciones sanitarias".