Según informó Defensa, el Gobierno autorizaba al titular de este departamento a introducir modificaciones en el despliegue del Ejército, y en virtud de esta potestad, el ministro Gustavo Suárez Pertierra ha stimado preciso aplazar la disolución o el traslado de determinadas unidades y adaptar la ubicación de otras.

Así, el Regimiento de Guerra Electrónica, que tenía previsto su despliegue en Marines (Valencia) con unas inversiones considerables, se mantendrá finalmente en Madrid, utilizando sus actuales instalaciones en El Pardo.

De la misma forma, el Regimiento de Artillería de Campaña de las Fuerzas Movilizables de Defensa se desplegará en León, aprovechando la infraestructura existente, en tanto ue el Regimiento Ligero de la División Mecanizada se asentará en Agoncillo (La Rioja) el próximo año.

Seis unidades, en su mayoría logísticas, de las regiones militares Sur, Pirenáica Oriental y Pirenáica Occidental verán retrasada su disolución de seis meses o un año, para aprovechar sus instalaciones en la redistribución de material y así ajustar el planeamiento a las posibilidades actuales, según las mismas fuentes.

Finalmente, seis batallones de Infantería y un grupo de Caballería, en distints puntos del territorio nacional, adoptan la estructura de Regimiento, con el fin de mejorar su capacidad de funcionamiento.

Con estas modificaciones, el capítulo correspondiente a la nueva organización de la Fuerza del Ejército de Tierra puede considerarse finalizado y, en el plazo de dos años, todas las unidades ocuparán sus destinos previstos, según Defensa.