La sentencia condena a la entidad financiera a retirar la citada publicidad. Esta consistía en carteles y folletos expuestos en sus oficinas en los que se presentaba el producto "Crédito automóvil" mediante la repoducción fotográfica de un coche de lujo y un único mensaje publicitario: "Elija su nuevo coche. El crédito ya lo tiene".

Acogiendo los argumentos de Ausbanc, la sentencia afirma que el mensaje de que puede lograrse automáticamente un crédito, tras adoptar la decisión de elegir un vehículo, "es evidentemente falso, ya que no se ajusta a la realidad bancaria".

El juez estima que, entre los consumidores a quienes pudiera interesar este tipo de operaciones están los jóvenes y colectivos que no conocn los productos bancarios. En consecuencia, la sentencia concluye que la publicidad puede inducir a error a los destinatarios, "pudiendo afectar a su comportamiento económico", algo penalizado por la Ley General de Publicidad al definir la publicidad engañosa.