"Lo del señor Arzallus", añadió Delgado en declaraciones a la Cadena Cope, "resulta bastante impresentable en ese sentido. Asesinos, secuestradores, parece que, al final, sean ellos las víctimas, y las propias víctimas que hemos cometido la provocación de pasar por un sitio en un momento determinado, o ser simplemente guardas civiles, o ciudadanos normales, somos los malos".

Luis Delgado explicó que "son varios miles de personas las afectadas por ETA en lo que es un entorno familiar directo. Muchos de ellos niños, muchas viudas que se han quedado sin un objetivo claro en la vida, porque el marido, alrededor de cuya vida giraba su razón de ser, ha desaparecido".

"Parece que el único que cuenta en todo esto es el terrorista, que ha sido empujado por esa pobre viuda y esas familias a ser terrorista, que él no es respodable de nada, que la sociedad ha sido la mala con él y que no ha tenido más remedio que ser terrorista, y, como la culpa es de la sociedad, la sociedad es la que tiene que desagraviar al terrorista. Es el colmo del cinismo", subrayó Delgado.

Asimismo añadió que "el Estado de Derecho se ha ocupado perfectamente de los derechos del delincuente, sea terrorista o no, y, sin embargo, los derechos de las víctimas siguen siendo unos derechos totalmente secundarios que se pueden pisotear cuando venga bien, ysi hay políticos por enmedio con mucha más facilidad".

"Para que ese Estado de Derecho se tenga como tal, tendrá que velar por los derechos de las víctimas, que no son menos importantes que los de los delincuentes. En ese caso, sí se podrá hablar de Estado de Derecho; habrá una justicia reparadora cuando cubra todos los aspsectos, y no solamente encerrar durante unos poquitos años, poniendo los asesinatos a un precio muy barato, a los terroristas", agregó el secretario general de la AVT.

A juiciode Luis Delgado, cualquier víctima de delito violento tiene derecho a recibir la indemnación que en concepto de responsabilidad civil marca el juez.

"Lo que pasa", señaló Delgado, "es que en este país, y las declaraciones del señor Arzallus son un ejemplo, la víctima es algo totalmente secundario, y no se ha legislado nada en su favor, ni se han tomado medidas de ningún tipo para que esas cantidades, y otros aspectos de las sentencias que tienen efecto reparador sobre la víctima, se hayan podido efectar, de tal forma, que en el caso de los terorristas, las deudas son 600.000 millones de pesetas. Han dejado pasar tantos años sin legislar que ahora tienen tal cumulo de deudas y actos sin reparar que la montaña es enorme".