Este censo, que se lleva a cabo en coordinación con el resto de países de la Unión Europe (UE), muestra que la actividad agraria española experimentó en los años noventa una mayor concentración y especialización, descendiendo el número de explotaciones y aumentando la superficie media útil por explotación.

Pese a que la superficie total censada bajó un 1,8% entre 1989 y 1999, hasta colocarse en 42,1 millones de hectáreas (Ha.), la superficie agrícola utilizada creció un 6,4%, situándose en 26,3 millones de Ha. Esto se traduce en un aumento de la superficie total media por explotación (de8,8 a 23,6 Ha.) y de superficie agrícola utilizada media por explotación (de 10,8 a 14,7 Ha.).

Los datos del INE muestran que aumentó la superficie agrícola utilizada tanto en el caso de las tierras labradas (un 4,1%) como en los pastos permanentes (10,6%). Dentro de las primeras, destaca el crecimiento del olivar (del 27%).

Por lo que se refiere al sector ganadero, en los años 90 descendió el número de explotaciones de cada especie de ganado (un -40,1% en el caso del bovino, un -17% en el ovino,un -42% en el porcino, un -37% en las aves y un -46,1% en el caprino), pero aumentó el número total de cabezas de ganado de cada especie (un 32,5%, 19,4%, 84,7%, 54% y 7,4%, respectivamente).

Por comunidades autónomas, los datos del INE señalan que la superficie total media por explotación más elevada corresponde a Aragón, con 51,8 Ha., seguida de Castilla y León (46,5 Ha.) y Navarra (37,5 Ha.). En cuanto a la superficie agrícola utilizada, las mayores explotaciones corresponden a Castilla y León, de na media de 33 Ha., junto con Aragón (30,8 Ha.) y Extremadura (26,4 Ha.).

Atendiendo a la utilización del suelo, Cantabria dedica la mayor parte de su suelo a los pastos, junto con Asturias. Dentro de las tierras labradas, Castilla y León tiene la mayor superficie de herbáceos (3,5 millones de Ha., de los 12,4 millones del total nacional). En frutales, la superficie mayor se sitúa en Valencia (309.545 Ha.), mientras que Castilla-La Mancha mantiene la supremacía en el viñedo (526.727 Ha.).

El Cens Agrario 1999 también muestra diferencias por comunidades autónomas en la ganadería. El mayor número de cabezas de bovino se encuentra en Castilla y León, donde se han censado 1.287.254, seguida de Galicia (1.084.912 cabezas). Castilla y León sigue encabezando la clasificación en el ovino, con 4.645.566 cabezas.

En porcinos, destacan las 6.019.632 cabezas de Cataluña, aunque llama la atención el aumento experimentado en Murcia, hasta 1.570.301 cabezas. El número de aves en Cataluña representa casi la ercera parte del total nacional, con un valor de 51.135.750 cabezas.