DEBATE SOBRE LA REDUCCION DE LA JORNADA LABORAL. EL PSOE SIUE SIN DEFINIRSE

MADRID
SERVIMEDIA

El problema del paro en Europa, que, según las últimas estimaciones, podría afectar a casi 16 millones de personas a finales de este año, ha obligado en las últimas semanas a abrir un amplio debate sobre la conveniencia o no de reducir la jornada laboral para repartir el escasotrabajo existente, debate en el que las posturas son muy variadas.

Este debate, como es lógico, también tiene su reflejo en nuestro país, donde hay opiniones para todos los gustos El PP, la CEOE o el consejero catalán de Trabajo son algunas de las voces que ya se han mostrado en contra de reducir la jornada.

Frente a ellas, otras, como IU o la fabricante de coches Nissan, figuran entre los defensores de reducir el tiempo de trabajo para repartir el empleo. Y en medio, el PSOE y el Gobierno, que lo estudian, pero todavía no se han pronunciado al respecto.

Fuera de nuestro país, ya han defendido la reducción de jornada los socialistas europeos, el PSOE francés, el ministro e Economía alemán y algunos fabricantes de vehículos como Volkswagen. El lado opuesto lo ocupan, entre otros, el canciller alemán, Helmut Kohl, los sindicatos y empresarios alemanes y la marca italiana de coches Fiat.

Ayer mismo, el congreso extraordinario de los partidos socialistas europeos aprobó un documento en el que defiende la reducción de la jornada de trabajo como solución al problema del paro, texto que servirá de base para elaborar los programas para las elecciones al Parlamento Europeo preistas para junio.

El PSOE español, que todavía no ha tomado postura sobre la reducción de jornada, suscribió este documento, aunque con cautelas. El representante español, Joaquín Almunia, dejó muy claro que el texto no compromete a las políticas nacionales y que dentro del PSOE las opiniones sobre esta materia son variadas.

VOLKSWAGEN, LA PIONERA

Pero, la primera gran empresa que se ha tomado en serio la reducción de jornada y que ha presentado una propuesta concreta en esta materia ha sido lacompañía alemana automovilística Volkswagen, que ha planteado a los sindicatos la semana de cuatro días y un recorte proporcional del 20 por ciento de los salarios, para mantener 31.000 empleos.

Esta propuesta, que ha reavivado el debate en toda Europa, choca frontalmente con las ideas expresadas por el canciller alemán, Helmut Kohl, que no sólo es contrario a la reducción de la jornada laboral, sino que defiende aumentarla a los sábados y reducir las vacaciones.

No opina lo mismo, sin embargo, s ministro de Economía, el liberal Günther Rexrodt, que defiende una mayor flexibilidad en el mercado de trabajo y cree que una propuesta como la de Volkswagen permitiría salvar cientos de miles de puestos de trabajo.

Pero los agentes más directamente afectados por una medida de este tipo, como son los sindicatos y los empresarios de ese país, ya se han mostrado en contra de reducir la jornada, aunque por razones bien distintas, como es natural.

En Francia, los socialistas se ha mostrado abiertamete a favor de la reducción de jornada para afrontar el grave problema del paro. Concretamente, el secretario general de este partido, Michel Rocard, defiende esta medida y apoya la semana de cuatro días.

El presidente francés, el socialista Francois Miterrand, también cree que Europa tendrá que plantearse la semana laboral de cuatro días, aunque advirtió que "debemos tener cuidado de que ello no suponga una especie de ilusión lírica que no tenga en cuenta los derechos de los trabajadores".

La prouesta de Volkswagen también ha tenido contestación dentro del propio sector de automoción. Otra gran marca europea, la italiana Fiat, se ha mostrado en contra. Su consejero delegadao, Cesare Romitti, declaró ayer en Barcelona que su empresa se opondrá a la reducción de jornada, "porque reduciríamos la competividad empresarial".

El presidente de Nissan Motor Ibérica, Juan Echavarría Puig, sin embargo, considera válida y aplicable en nuestro país reducir la semana de trabajo a cuatro días, pero cree queesta propuesta es válida si es acordada con los sindicatos.

DISCUSION EN ESPAÑA

La discusión sobre la reducción de jornada en España se ha producido paralela a otro debate más amplio, la reforma del mercado de trabajo en general, que se ha centrado en el Consejo Económico y Social (CES), del que ha salido un dictamen que será tenido en cuenta por el Gobierno en la reforma que tiene previsto llevar a cabo.

Sobre el aspecto concreto de la semana de cuatro días, el partido de la oposición, a travé de su líder, José María Aznar, se ha mostrado totalmente en contra de esta medida y cree, además, coincidiendo con Kohl, que la solución está en trabajar "más días y más horas".

El presidente de la CEOE, José María Cuevas, también ha entrado en este debate, y considera que la reducción de las horas de trabajo es ineficaz para crear empleo y sólo puede funcionar de manera puntual y en situaciones transitorias de reconversión de empresas.

El PSOE y el Gobierno estudian esta medida, pero permanecencallados, y todavía no se han pronunciado abiertamente ni a favor ni en contra de la jornada laboral de cuatro días. El Ejecutivo prefiere esperar a la reforma del mercado de trabajo que pondrá en marcha con o sin el acuerdo de los interlocutores sociales, y en la que no faltarán medidas para flexibilizar el mercado de trabajo.

La otra parte, los sindicatos, defienden el reparto del empleo en tiempos de crisis, pero el problema radica en aceptar que esta medida vaya acompañado de una reducción proporconal del salario, lo que tendría una dura contestación por parte de los trabajadores.

Otra voz que también ha salido al paso es la del consejero catalán de Trabajo, Ignaci Farreras, para quien reducir la jornada laboral a cuatro días sólo sería una solución a corto plazo para reducir el desempleo, pero no es un proyecto viable a largo plazo.

Lo que parece claro es que la salida al debate se presenta difícil y la búsqueda de soluciones al grave problema del paro va retrasándose, mientras el númerode desempleados aumenta de manera vertiginosa en nuestro país y en toda Europa.

Con toda probabilidad, el Libro Blanco sobre el empleo en Europa, encargado por Jacques Delors a la Comisión de la CE y que será presentado en breve, planteará algún tipo de medidas para afrotar el desempleo e intentar salir de este bache de destrucción masiva de puestos de trabajo.

(SERVIMEDIA)
07 Nov 1993
NLV