La multinacional BSN Gervais hizo público hace tres meses su decisión de cerrar la fábrica de Iraizotz y dar trabajo a todos los empleados en instalaciones de diversas ciudadades españolas. Dirección y sindicatos, que comenzaron poco después las negociaciones sobre este cierre, acordaron darse un plazo de 100 días, que acabó ayer, para llegar a una solución aceptable para ambas partes.

Entre las alternativas barajadas pr la empresa está la reindustrialización de la zona. La multinacional ofertó para ello sus activos, valorados en 1.500 millones de pesetas, más 175 millones como fondo de creación de empleo y otros 40 millones para urbanizar el polígono de Iraizotz. Todo ello se destinaría a una fundación, gestionada conjuntamente con el Gobierno de Navarra.

Danone asegura que existen al menos siete empresas interesadas en asentarse en este valle navarro y con capacidad para crear 207 puestos de trabajo. Los sindicato han afirmado en repetidas ocasiones que la cifra es muy inferior a la anunciada.

Frente a los puntos de desacuerdo, la negociación de las soluciones individuales ha ido por buen camino. Existe un acuerdo casi absoluto sobre prejubilaciones, empleos-puente en la zona y sobre traslados a otras plantas. Las posturas están también muy cercanas en lo referente a las recolocaciones exteriores en factorías del mencionado valle y sobre la cuantía de las indemnizaciones.

Sin embargo, la asamblea de trabaadores ha desechado los preacuerdos, a la par que apoyó la convocatoria de tres días de paro en la fábrica, lo que, según la multinacional, ha roto el periodo de conversaciones que acordaron el comité de empresa y la dirección.

La mayoría de los trabajadores se mostró partidaria de que, junto a otras ofertas, la firma se comprometiera a aportar cinco millones de pesetas por cada uno de los puestos de trabajo no creados a la fundación que gestionará los activos de Danone.

Parece ser que esta últim postura es la que ha llevado a la multinacional a anunciar el envío de las cartas de traslado. De llegarse a este extremo, entre otros aspectos, significaría una reducción muy importante de las indemnizaciones acordadas que, de media, rondaban los 45 días por año.

El comité de huelga de la factoría se reunió hoy con la dirección de la planta de Iraizotz para transmitirle el apoyo de la plantilla al paro que continuará hasta el lunes y el rechazo a las garantías que la empresa mantiene para la reindusrialización del valle de la Ultzama.