Mantero dijo a Radio Nacional que cree que ser sacerdote católico y gay no es incompatible, sino "algo perfectamente natural, y lo defenderé siempre".

"¿Hay gays cristianos? Pues si. ¿Hay gays sacerdotes? Si, somos miles. Es alg totalmente natural. Dios, el que creó al heterosexual, Dios creó al gay".

Asimismo, Mantero declaró a la Cadena Ser que todavía tiene que "hablar" con el Obispado de Huelva antes de que haga efectivo el anuncio de que previsiblemente le suspendarán "ad divinis", con lo que quedaría apartado del ejercicio de las funciones sacerdotales.

El sacerdote de Valverde destacó que quiere dar un mensaje de que "se puede ser perfectamente gay y sacerdote, gay y cristiano. Dios quiere y ama entrañablemente a gay, al igual que ama entrañablemente al heterosexual o a la lesbiana e, incluso, al transexual".

Según explicó, el debate de fondo de su 'salida de armario' no es el celibato sacerdotal o la homosexualidad de los sacerdotes, sino "la aceptación natural de la homosexualidad no sólo en el seno de la Iglesia, sino en la misma cultura católica, al reconocer que Dios creó a un heterosexual y Dios mismo creó un gay. Ese es el fondo de la cuestión y no el morbo, el tomate o la carnaza".

Finalmente, Matero lamentó lo mal que lo han pasado sus padres después de confesar que es gay, por el acoso de los medios de comunicación, que, según dijo, en algunos casos se han portado de manera "cruel".