Zapatero actuará en Barcelona como anfitrión de los mandatarios y líderes socialdemócratas europeos miembros de la Internacional Socialista, que se reunirán en la ciudad antes del comienzo del Consejo Europeo.

Antes de esta Cumbre, Zapatero ha enviado a sus colegas europeos un documento, titulado "Barcelona: Ciudadanía y Solidaridad", en el que el PSOE expone su visión de lo que debe ser esta Cumbre.

"El Partido Socialista", asegura el documento, "considera que el debate de Barcelon no puede convertirse en un estéril enfrentamiento entre los que defienden la falsa liberalización económica como un fin en sí misma y los que, desde las instancias cívicas, lanzan gritos indiscriminados contra la Unión Europea".

En opinión de los socialistas, este cónclave debe ser "un avance hacia una Europa más unida y más próxima a los ciudadanos, más receptiva a las demandas y necesidades sociales, así como más sensible a las aspiraciones de una mayor igualdad en el mundo".

Europa, añade, dee ser "el motor que desarrolle la democracia, los derechos humanos y la justicia social en el mundo. Así, la Unión Europea se convertirá en el instrumento más útil para el gobierno de la globalización y en el mejor impulso de solidaridad entre los pueblos".

"Si queremos preservar este modelo, Europa no puede postergar el debate sobre nuevas formas de ciudadanía, abiertas e inclusivas y que tomen en consideración los nuevos valores emergentes". Por el contrario, los socialistas consideran que ese gran royecto de Europa sólo será posible si demuestra una clara orientación, no sólo hacia la competitividad, sino hacia la solidaridad.