El líder socialista declaró a Onda Cero que en Barcelona "se ha percibido que hay dos matices, dos sensibilidades, dos almas en lo que puede ser la construcción europea".

"Una que piensa sólo en la Europa económica y, otra, más vinculada y que piensa más en la Europa social", afirmó. Sobre las manifestaciones antiglobalización, se mostró satisfecho por "la creciente sensibilidad ciudadana por reclamar una Europa más social y un mundo más solidario".

Respectoal congreso de los socialistas vascos, comentó que hay que "ser conscientes de que están en una situación complicada por la amenaza de los violentos y que tienen una especial dificultad porque hay muchas miradas y muchos intereses puestos".

Agregó que las tres personas que concurren "gozan de mi simpatía y de mi confianza" y cualquiera que resulte elegido permitirá que el PSE represente un punto de esperanza distinto, alternativo a la situación que se vive en estos momentos", desde la defensa "a ultraza" de la Constitución.

Rodríguez Zapatero criticó la actitud de esta semana del ministro Mariano Rajoy en el Parlamento porque "no se pude hacer una sesión gastando bromas, muchas de ellas malas, sobre lo que estaba preguntando el grupo socialista con relación a la seguridad ciudadana".

El dirigente del PSOE también se refirió al hecho de que el presidente del Gobierno aún no se ha reunido con él para hablar de terrorismo, como le ha pedido. A su modo de ver, es "inexplicable que el líder de la posición quiera hablar con el presidente del Gobierno y él lo niegue" porque, según él, hay que unirse y dialogar "cada día entre los demócratas para derrotar a ETA para que no tenga ninguna esperanza, que cada día se vea más acosada".