González participó en un coloquio sobre la demoracia en Europa organizado por la Fundación Alternativas, donde alertó de que la Unión Europea no recuperará relevancia mientras no defina con claridad su papel en la globalización.

El ex presidente basó sus advertencias sobre el resultado de esta cumbre para España en que nuestro país carece de socios para negociar, por ejemplo, el reparto presupuestario, ya que los grandes pretenden que los pobres de la actual Unión Europea transfieran los fondos que reciben a los más pobres de la ampliación, y los equeños son los beneficiarios de ese traspaso de fondos. "El primo Tony, el de Zumosol, no nos va a ayudar en eso", indicó

González ironizó con la reiterada afirmación de Aznar de que su opinión es "tan europea como cualquiera", y le alertó de que lo importante es saber "si esa opinión es europeísta, no europeísta o 'aserejé'. Y España lleva mucho tiempo con opiniones 'aserejé'".

Respecto al papel internacional de la UE, el ex jefe del Gobierno aseguró que Europa es ahora mismo un grupo de "buenoes profesionales", pero que no será tomada en serio mientras no tenga capacidad económica y ejecutiva para situar 100.000 hombres donde se lo pida Naciones Unidas.

Prueba de ello, dijo, es que Estados Unidos sólo se ha interesado por la Unión Europea en lo relativo a Iraq cuando ha necesitado "socializar los perjuicios por no haber podido privatizar los beneficios".