Asimismo, el PP pide que el FORPPA conceda una subvención anual de 2.000 pesetas por tonelada de caña de azúcar producida durante los próximos cinco años, se establezcan las necsarias líneas de investigación para lograr la mejora técnica del cultivo, mecanización, experimentación de nuevas variedades, etcétera, y se potencie el Centro de Cultivos Subtropicales de Churriana (Málaga).

España es el único punto del continente europeo donde se cultiva la caña azucarera desde hace siglos. Una actividad económica incapaz de competir con los bajos precios que ofrecen los países en desarrollo, pero que es necesaria para sanear las tierras donde se ubica, con un nivel freático (del aga subterránea) muy superficial.

Este cultivo evita que las tierras donde crece acumulen infecciones de hongos y gusanos a las que que, por sus caracteríticas, son muy proclives, por lo que su valor ecológico es muy alto.

Además de no existir otro cultivo que en 4 ó 5 años sanee las tierras sin tener que utilizar productos químicos tan perjudiciales para la flora, fauna y salud humana, la caña de azúcar da sustento a 1.200 familias de manera directa.

En la actualidad, se dedican a este cultiv 1.600 hectáreas, situadas fundamentalmente en las comarcas de Motril-Salobreña, en el litoral granadino, y en las de Torre del Mar y Málaga, en ésta última provincia.

Asimismo, la mano de obra empleada en la recolección de la caña procede del nivel poblacional con mayor paro en la comunidad andaluza.

La producción de la última campaña (100.000 toneladas) se verá reducida entre un 15 y un 20 por cien en la próxima y la única industria que queda en el sector es la de Salobreña, toda vez que el añopasado cerró la Azucarera Hispania de Málaga.

A este declive no es ajena la desaparición, en 1990, de la subvención al cultivo que durante cinco años concedió el FORPPA, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, al objeto de salvaguardarlo de la competencia de la libre importación de melazas procedentes de los países ACP y asociados.