Cueas anunció que solicitará una entrevista con el presidente del Gobierno, Felipe González, para trasladarle la opinión de los empresarios sobre la economía, que resumió como "muy dura, difícil y delicada".

A su juicio, "están empezando a sonar todos los timbres de aviso", aunque la situación no es "dramática, irreversible o catastrófica" y obedece, en parte, a que la esperada reactivación internacional "ni es tan intensa ni se producirá de manera inmediata".

Para Cuevas, sólo con anticipar la adopión de las medidas del Plan de Convergencia, la economía española podría recuperarse con batante rapidez y crecer por encima de la media europea.

Si no se adelanta la puesta en marcha del plan, para frenar el gasto público y los desequilibrios de la inflación y el déficit exterior, "la situación dura y difícil podría hacerse irreversible", advirtió.

Entre las reformas que el Gobierno debe hacer urgentemente, citó la supresión de la autorización administrativa de los expedientes de regulación de epleo y la revisión del papel del sector público en la vida empresarial.

Agregó que hablar de política de rentas sin modernizar regulaciones del mercado de trabajo como las que limitan la autorización de los despidos colectivos es "insuficiente".

Hizo hincapié en la necesidad de adaptar el gasto público a la evolución de los ingresos, manteniendo la inversión y el gasto en infraestructuras, y corrigiendo los gastos del INEM, la sanidad y algunas empresas públicas.

Estas medidas, opinó, permitrían un ahorro sustancial para mantener la inversión pública. Por contra, señaló que recortar el déficit público a base de aumentar impuestos o retrasar pagos es sólo una solución a corto plazo que no resuelve los problemas de competitividad de la economía.

Finalmente, Cuevas comentó la entrevista mantenida ayer entre González y los líderes sindicales y, tras valorar positivamente el clima de diálogo abierto, recalcó que "la ejecución del Plan de Convergencia no debe estar condicionado por ningún compomiso de pacto social".