Así lo señala en un artículo recogido en la separata que publica todos los meses a lo largo de este año la patronal de empresas del sector del metal (Confemetal), junto con el Boletín de Coyuntura Económica y Laboral, para conmemorar el 20 aniversario de Confemetal.

Cuevas destaca la extraordinaria capacidad de adaptación que ha tenido siempre la empresa española, lo que le ha permitid no sólo sobrevivir en condiciones adversas, sino afianzar su posición competitiva en los mercados internacionales. Sin embargo, cree que "aún quedan muchas cuestiones pendientes y algún que otro reto que afrontar".

Según Cuevas, el primero de estos retos es consolidar el actual modelo de crecimiento estable, sostenido y con una elevada capacidad para generar empleo, porque, a su juicio, "es evidente que si la economía marcha bien, las empresas también y, por tanto, los ciudadanos podrán alcanzar mayo grado de bienestar".

Para ello, Cuevas considera que es necesario seguir aplicando una política presupuestaria "rigurosa", que recoja un aumento de las inversiones públicas en infraestructuras. También es "primordial", en su opinión, que la presión fiscal directa e indirecta que tiene la empresa española no crezca e incluso mejore.

En este sentido, destaca que hay que luchar para que no se reduzcan los incentivos a la actividad empresarial y para conseguir la supresión del Impuesto de Actividade Económicas, al tiempo que rechaza la pretensión de algunos países comunitarios de establecer un impuesto mínimo sobre la energía y los carburantes en toda la Unión Europea (UE).

Cuevas insiste también en la necesidad de establecer la discusión sobre la adecuada financiación de la Seguridad Social y las políticas de bienestar social, "con el objetivo de que las contribuciones empresariales a la Seguridad Social se correspondan con las prestaciones propias del sistema profesional y sean comparables conlas de nuestros competidores extranjeros".

Además, el dirigente de la CEOE pide al Gobierno que continúe con el proceso de simplificación administrativa para la empresa y la actividad económica iniciado tímidamente en 1998. Para Cuevas, "si conseguimos un claro avance en todas estas cuestiones, el próximo milenio presenta oportunidades para la empresa española".