Cuevas hizo estas manifestaciones al término deuna reunión mantenida por la junta directiva de la CEOE, en respuesta a una pregunta sobre si un cambio político como los que han tenido lugar recientemente en Francia o Estados Unidos.

"Yo creo que a donde han llegado las cosas", afirmó, "en principio el cambio político que puedan decidir los ciudadanos españoles después de estas elecciones, en principio, y es mi propia opinión personal, por lo menos puede ayudar a eliminar una serie de incertidumbres que es hoy uno de los condicionamientos más imporantes de la paralización de nuestra economía".

Cuevas aseguró que la CEOE se mantendrá al margen de la contienda electoral, aunque defendiendo su decálogo para la salida de la crisis, que incluye la rebaja de cuatro a cinco puntos en los tipos de interés y la supresión del Impuesto de Actividades Económicas.

Precisó que están dispuestos a reunirse con los partidos políticos que se lo soliciten para explicarles las propuestas empresariales, pero dejó claro que no consentirá que les conviertan "en hivo expiatorio de esta campaña política electoral".

No obstante, acusó expresamente al PSOE y al Gobierno de intentar mezclar a la patronal "de manera vergonzante" en la batalla electoral, tras la presentación del decálogo de la CEOE en la asamblea de empresarios celebrada en Madrid.

"Ahí tengo que ser exquisitamente objetivo, ninguno de los demás partidos políticos ha incurrido en esa especie de suciedad, por decirlo de alguna manera. Sólo ha sido el Gobierno y el Partido Socialista", subrayó. En su opinión, el adelantamiento de las elecciones llega tarde y debió hacerse en otoño del año pasado. De esa manera, opinó, se habría ganado un año a la crisis, ya que el nuevo Gobierno no comenzará a trabajar activamente hasta el otoño del 93.

Cuevas manifestó claramente su satisfacción por el hecho de que el adelantamiento de las elecciones haya frustrado la promulgación de la Ley de Huelga y añadió que reclamarán que se incluya ahora en la negociación glogal de la reforma del mercado laboral. Respecto al documento sobre dicha reforma enviado por el Gobierno al Consejo Económico y Social (CES), lo calificó de "importante" y valoró positivamente que ponga como modelo a seguir los existentes. "La única pena es que llega con dos o tres años de retraso", añadió.

MODERACION SALARIAL

En cuanto a la marcha de la economía hasta las elecciones, señaló: "Yo creo que vamos a seguir con la sensación de estar en el fondo de la crisis, porque no va a haber iniciativas significativas hasta que trancurra el proceso electoral, y porque, mientras no se remuevan algunas de las limitaciones, bien sea de costes financieros, sociales, laborales o fiscales, es muy difícil que se reactiven los procesos de inversión", apostilló.

Cuevas expresó su confianza en que el clima de incertidumbre económica facilite una mayor moderación salarial y señaló que, en los primeros meses de este año se ha apreciado una menor conflictividad laboral.

Sobre la posibilidad de una tercera devaluación de la peseta, dijo ue dependerá de cómo perciban los inversores que financian el déficit público con la compra de títulos de deuda.

Pronosticó que el Gobierno hará todos los esfuerzos para evitar esa devaluación, mediante el gasto de las reservas de divisas para defender la moneda nacional "e incluso puede suceder que para evitar esa situación, en vez de bajar los tipos de interés, puedan subir algo en las próximas semanas".

Finalmente, el presidente de la CEOE reiteró que la patronal está dispuesta a participar enuna concertación social global tras las elecciones, independientemente de quien gane los comicios.